La Asociación Cultural Burdalia, comenzó su andadura en nuestro pueblo hace ya muchos años, con personas comprometidas con unas ideas y para desarrollar la cultura de Villamesías, pero por diversos motivos, esta asociación hizo aguas, y nos quedamos sin ella, hasta que hace unos dos años, jóvenes comprometidos, que saben divertirse a la vez que dar parte de su tiempo a su pueblo, decidieron volver a sacarla del olvido en donde estaba metida y desde entonces va funcionando, como todas las asociaciones con más o menos problemas y sobre todo los económicos, ya que es muy difícil conseguir dinero para una asociación de un pueblo tan pequeño, aunque todos tenemos derecho a difundir nuestra cultura incluso los más pequeños. Tendría que ser al contrario y dar más oportunidades a los que sin un duro pueden montar un teatro, por que con muy poca ayuda seria un empuje lo suficientemente grande, para poder mantenerla y que no se volviera a repetir la historia por segunda vez.
Contamos con ella siempre que Villamesías lo necesita, los Carnavales no serian lo mismo sin ellos, todos los años, tienen en vilo a un pueblo, hasta que salen con sus disfraces, originales como ninguno, y sobre todo, se espera sus charangas en las que de una forma divertida nos dan un tirón de orejas a las personas que lo necesitamos, año tras año lo consiguen y por eso dice un refrán “ es de bien nacidos, ser agradecido”, desde esta pobre revista, queremos daros las gracias por esos momentos tan inolvidables que nos hacéis pasar, y por ofrecernos vuestra ayuda. No sería lo mismo la Navidad, no seria lo mismo la Semana Cultural, y este año, nos han obsequiado con dos obras de teatro, en las que llevaban ensayando mucho tiempo, muchas noches de no estar en la plaza tomándose tranquilamente un refresco, muchas noches de no estar con su familia, por darnos un poco de cultura, muchas noches de ensayar en la distancia, ya que muchos se encontraban lejos de aquí, y han conseguido con trabajo, darnos una noche de teatro, en la plaza del pueblo.
Esa noche la plaza estaba llena, porque han conseguido levantar entusiasmo e interés en un pueblo, que aunque dicen algunos que es apático nos demuestra que a lo mejor lo que necesita es que se implique en estas actividades, todos podemos poner un granito de arena, todos no podemos ser iguales, pero todos podemos ser útiles sino es de una forma de otra.
Este año para comenzar nos sorprendieron con un escenario muy especial, el atrio de la iglesia, un lugar especial para las obras que iban a representar.
Se quejaban de que tenían mala suerte,” siempre hace aire cuando preparamos el teatro”, pero incluso con el aire que hacia, hicieron disfrutar a todas las personas que estaban presentes.
Comenzaron con la representación teatral “EL HOMBRE QUE CASO CON MUJER BRAVA”. El propósito de esta obra de teatro es el de entretener y divertir, a través de una trama de burla y enredo, en un ambiente desenfadado y festivo, con un propósito didáctico, y a través del humor crítica determinadas actitudes sociales y es una amable sátira de algunos comportamientos humanos.
Alejandro Casona, escribió esta obra en un momento de crisis del teatro español.
En esta fotografía podemos ver a parte del reparto, Anabel (madre de la novia), Raquel (la mujer brava), Alejandro, (padre de la novia) y Victor (el flamante novio).
A pesar de no ser profesionales, representaron esta obra fenomenal. Animo seguir asi.
FIN DEL PRIMER ACTO.
Continuaron con la representación teatral “CORNUDO, APALEADO Y CONTENTO” ( La Farsa).
Una divertida comedia con mucho humor para toda la familia. Un homenaje a los actores trashumantes, como la comedia del arte en Italia, los comediantes de la lengua en España y en nuestro país los hermanos Podesta. Este espectáculo esta basado en uno de los cuentos de Bocaccio.
En esta fotografía podemos ver los actores que representaron esta obra, Pepi, Alejandro y a David escondido dentro de un baúl, son muy buenos, además les gusta el teatro y se preparan concienzudamente para realizar las obras.
Nos hicieron pasar una noche especial, ya que en la memoria de muchas personas estaba la idea de que hace muchos años el teatro llegaba a los pueblos, de esta forma, en su plaza, ahora no tenemos que llevar sillas, pero antes cada uno se llevaba el botijo y la silla de casa, era una forma de salir por unas horas de la rutina. Al igual que pasa hoy día.
Esta es una de las últimas escenas de la representación, el apaleamiento del marido, por parte del sirviente.
Sólo tirar una piedra, para que la recojan los interesados, esta asociación tuvo que alquilar el equipo de altavoces, y ellos fueron los que lo pagaron, sólo por lo bien que trabajan, deberíamos apoyarles un poco más.
Recordar también que los que nos pusieron en antecedentes de las obras fueron Dany y Jesús.
Esperamos seguir contando con vosotros durante muchos años, y que sirváis de ejemplo a la siguiente generación.
Fdo. Ángeles Ramos Broncano